México, 26 dic (EFE).- El actor mexicano Horacio García-Rojas participará en la nueva cinta de Clint Eastwood, “Cry Macho”, un sueño que nunca pensó que podría hacerse realidad y de cuyo rodaje se desprende “una lección de vida”, más allá de los aprendizajes cinematográficos.
“(Eastwood) es de esas personas que siguen estando ahí porque la pasión los llama. Deciden seguir contando historias porque es lo que les apasiona y les divierte. Si bien tengo mis años de experiencia me falta camino por recorrer y yo quiero llegar a los 70 con esa vitalidad”, expuso el actor.
EL ANTAGONISTA DE EASTWOOD
“Cry macho” es la producción número 42 del estadounidense de 90 años y relata la historia de un hombre que fue una estrella de rodeo y ayuda a un joven con problemas a entrar a Texas (EE.UU.) desde México.
En la cinta, García-Rojas, protagonista de la serie “Diablero” y actor en “Narcos: México”, da vida al antagonista de Eastwood, quien además de dirigir la película la protagoniza, después de haber superado un casting.
“Los casting siempre son peculiares porque es aventar una moneda al aire, pero uno le pone todo el corazón, más allá del talento, sobre todo ahora en pandemia” dijo.
Junto a él, Eduardo Minett y Natalia Traven completan el equipo mexicano de la cinta dirigida y protagonizada por Eastwood, quien habitualmente cuenta con nuevos talentos en sus películas.
“Él tiene un trabajo digamos comunitario, entendiendo que el arte cinematográfico es un tablero de ajedrez donde cada ficha cumple una función vital y todas son importantes y ha generado una familia”, dijo García-Rojas.
La pandemia le trajo malas noticias al mexicano cuando se canceló un gran proyecto de Amazon Studios en el que iba a participar junto al español Javier Bardem y, aunque el golpe fue duro, “Cry macho” le ayudó a mantener la ilusión.
Además, enfocó sus energías en la educación de su hija, en pasar tiempo con su familia y consumir cultura.
EL RACISMO EN MÉXICO
Sobre las circunstancias de la cultura en México, García-Rojas consideró que 2020 fue un año importante para abrir la puerta del cambio con respecto a temas como el racismo, el clasismo, los límites del humor, generando debates candentes y, algunos de ellos, constructivos.
“Hay mucho camino por recorrer, pero se han visto algunos destellos que hablan de una intención de cambiar narrativas. A veces parece que se está acabando pero entras a plataformas y ves carteles que te dicen ‘esta historia es muy mexicana’, pero ¿por qué todos son blancos? México no es así”, expresó.
Además, se refirió a ciertas cintas que, según él, perpetúan los modos de hacer cine que contribuye a estereotipos, como por ejemplo la cinta “Nuevo orden” (2020) del mexicano Michel Franco, que dividió al público, pues algunos la consideraron clasista y racista.
Para García-Rojas, las cosas empezarán a cambiar realmente cuando la población comience a cuestionarse sus privilegios y empiece a ver cómo, desde su posición, puede contribuir a que dichos privilegios se hagan extensibles a toda la población.
También defendió la idea de poder contar historias del México real que él y muchas otras personas viven en su día a día.
“A veces parece que México y Latinoamérica son incertidumbre, desolación, narcotráfico y comedia banal y yo digo ¿dónde está el México que conozco? El México de mi hija que ríe, el México de la esposa que amo, de mis papás que me apoyan, de las pirámides, de los pueblos mágicos”, reivindicó.
En 2021 García-Rojas espera que salgan adelante proyectos que se quedaron a medias por la pandemia con los que está emocionado, entre ellos un proyecto sobre el racismo en México con el ilustrador Raúl Valdés. Info, Prensa Mexicana