Washington, 16 mar (EFE News).- Mientras cientos de miles de migrantes siguen llegando a la frontera sur de Estados Unidos, los demócratas en el Congreso bregaron este martes por leyes que favorecerían a los beneficiarios de los programas Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y Estatus de Protección Temporal (TPS), así como a los trabajadores agrícolas.
El Comité de Reglas de la Cámara de Representantes discutió un proyecto titulado “Ley de Promesa y Sueño de EE.UU” (H.R.6) y otro titulado “Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola” (H.R. 1603).
De ser aprobado, el primero de ellos abriría una senda para la legalización y ciudadanía a más de 700.000 migrantes indocumentados traídos al país cuando eran menores de edad y unos 400.000 migrantes amparados por el TPS.
La segunda iniciativa llevaría a permisos de residencia y trabajo permanentes para cientos de miles de trabajadores empleados en la agricultura.
Los proyectos se enmarcan dentro de la promesa del presidente Joe Biden de una política migratoria “justa y humanitaria”, pero son solo porciones de una reforma integral que busca resolver la situación de unos 11 millones de inmigrantes indocumentados.
Los demócratas esperan tener una votación en el pleno de la Cámara esta misma semana a pesar de que el incremento en el número de migrantes menores de edad que llegan a la frontera aparentemente ha disminuido las posibilidades de un acuerdo bipartidista sobre algo relacionado con la inmigración.
El presidente del Comité, Jim McGovern, demócrata de Massachusetts, dijo que todo el problema de la inmigración se ha tornado en una gran disputa politizada y partidista.
“Mucho se habla de una crisis humanitaria en la frontera, pero lo que hay es una crisis en los países de América Central.La gente envía a sus niños fuera del país porque temen por sus vidas. Cualquiera de nosotros haría lo mismo si fuesen nuestros hijos”, declaró.
“Hasta que encaremos esa realidad seguiremos viendo esto mismo. El asunto es, para nosotros, qué hacemos con estos niños. Hablamos de esto y nos enredamos en una retórica polarizante. A cierta altura, demócratas y republicanos tendremos que determinar cuál es nuestra política hacia América Central y cómo podemos ayudar a que estos países se recuperen”, indicó.
La legisladora Norma Torres, demócrata de California, nacida en Guatemala y quien tenía cinco años de edad cuando ella y un tío ingresaron a Estados Unidos con visa de turista, dijo que “como mujer ahora que fue enviada a este país siendo niña”, entiende el drama de los migrantes.
“Las condiciones eran tan peligrosas en Guatemala que mis padres tomaron esa difícil decisión de enviar a su hija menor a Estados Unidos. No puedo siquiera imaginarme hacer eso como madre y ahora abuela. Es desmesurado que un país como Estados Unidos que tiene tanto que ofrecer y fue fundado por inmigrantes no vea el aspecto humano en estos jóvenes”, manifestó.
Los republicanos, que son minoría en la Cámara de Representantes, han presentado numerosas enmiendas al proyecto de ley H.R. 6, incluida una del representante Mark Green, de Tennessee, que prohíbe la remoción de las barreras y cercas existentes en la frontera.
Otras enmiendas republicanas apuntan a negar la elegibilidad para la legalización de los inmigrantes indocumentados que hayan sido condenados por delitos, incluso menores, y una de Kevin Hern, de Oklahoma, establece que “el inglés es el idioma oficial de Estados Unidos”.
El republicano Scott Perry, de Pensilvania, presentó una enmienda que revoca la designación de Venezuela para el TPS. Info, Prensa Mexicana