Washington, 30 jul (EFE News).- El gobernador de Texas, Gregg Abbott, encara este viernes una posible querella judicial del gobierno federal después que ordenó a la policía de ese estado que detenga vehículos que puedan transportar migrantes.
Abbott, que es republicano, firmó este miércoles un decreto permitiendo a los agentes del Departamento de Seguridad Pública de Texas detener, regresar o incautar a los vehículos civiles que transporten indocumentados que recién ingresaron al país.
En respuesta el fiscal general de EE.UU., Merrick Garland, le advirtió a Abbott en una carta que la orden ejecutiva “viola la ley federal en numerosos aspectos, y Texas no puede hacer cumplir legalmente la orden contra ningún funcionario federal o partes privadas que trabajen para los Estados Unidos”.
El Departamento de Justicia, añadió Garland, “tiene la intención de recurrir a todos los remedios legales apropiados para asegurar que Texas no interfiera con las funciones del gobierno federal” si Abbott no rescinde su orden.
La advertencia legal de Garland a Abbott es la última en una batalla entre Texas y la administración del presidente Joe Biden por la inmigración.
Abbott indicó que su orden a las agencias policiales de Texas tiene el propósito de impedir el transporte privado de migrantes indocumentados que, según el gobernador, presentan un riesgo a la salud pública ya que pueden ser portadores del coronavirus.
En la última semana las hospitalizaciones por la covid-19 en Texas han aumentado casi un 40 %.
“Esta medida impide que Texas sea un estado que da la bienvenida”, afirmó Linda Rivas, directora ejecutiva de Las Americas Immigrant Advocacy Center en El Paso. “El decreto criminaliza la compasión y la generosidad y afecta a quienes por razones humanitarias transportan inmigrantes para que puedan continuar sus sendas”.
Semanas atrás, Abbott anunció que Texas continuaría con la construcción de un muro en la frontera con México, una idea del ex presidente Donald Trump (2017-2021) quien había iniciado esa obra con intención de extenderla a todo el límite internacional para detener la migración ilegal.
Asimismo, Abbott amenazó con suspender las licencias estatales de entidades en Texas que, bajo contrato con el gobierno federal, se usen para albergar a los migrantes menores de edad que llegan a la frontera sin la compañía de adultos responsables. Info, Prensa Mexicana