Nueva York, 11 may (EFE News).- Una coalición de grupos, liderados por el Instituto George Bush, así como de derechos humanos, de refugiados, empresarios o religiosos ha pedido al Congreso que apruebe el proyecto de reforma migratoria que consideran pondría fin a la difícil situación en la frontera sur del país.
“La actual situación en la frontera enfatiza la urgente necesidad de modernizar el sistema de inmigración para que pueda aumentar la eficiencia de la inmigración legal, garantizar de forma más eficaz la seguridad, dar la bienvenida a refugiados y mantener la esencia del sueño americano”, señala la carta al Congreso apoyada por más de 20 organizaciones y dada a conocer por el Instituto.
La misiva destaca que la situación en la frontera, donde no han parado de llegar familias inmigrantes y niños no acompañados en los últimos meses, está creando tensiones en los servicios migratorios y humanitarios en el país.
Pero, a su vez, recuerda que no es una situación nueva ni tampoco un asunto político. “Hemos visto antes números similares (de inmigrantes) en la frontera y sin una acción significativa bipartidista lo veremos nuevamente”.
Bush, que apoyó una reforma migratoria bajo su presidencia (2001-2009) que no se logró, ha señalado que está haciendo campaña entre los republicanos en el Congreso con miras a que se apoye el proyecto presentado por el presidente Joe Biden que otorgaría un camino a la ciudadanía a unos 11 millones de indocumentados, siempre y cuando no tengan antecedentes penales y pagan sus impuestos.
El exmandatario republicano, de 74 años, ya había mostrado su apoyo a la medida en un editorial que publicó en abril en el diario The Washington Post, en el que consideró que sería “injusto” que se otorgue otra amnistía como ocurrió bajo la presidencia de Ronald Reagan, en 1986.
Igualmente ha señalado que la inmigración es un asunto que “se ha politizado demasiado”, que requiere un liderazgo que disipe los temores y la búsqueda de soluciones de sentido común.
A su llegada a la presidencia en enero, Biden cumplió con su promesa y anunció un proyecto de ley que llevaría a millones de indocumentados a lograr la ciudadanía, comenzando por los agricultores, los beneficiarios de DACA y TPS.
El proyecto ya está en el Congreso pero no cuenta con el apoyo de los republicanos.
La coalición aplaudió los esfuerzos de republicanos y demócratas por otorgar un camino permanente para la ciudadanía para trabajadores agrícolas, los beneficiarios del programa de Acción Diferida para los Llegados en su Infancia (DACA) y del Estatus de Protección Temporal (TPS).
Sin embargo, advierten en la misiva, estos esfuerzos de por sí no atienden la situación en la frontera o cualquier otro elemento que actualmente ejerza presión sobre el sistema.
La frontera, afirman, sigue siendo una prioridad central a la vez que continua la migración legal.
“A través de una reforma migratoria que atienda la totalidad de las necesidades de la nación, podemos poner fin al ciclo de situaciones comprometedoras en la frontera sur, asegurando que los migrantes tengan apropiados y accesibles canales legales para migrar y recibir adecuado apoyo humanitario”, indica el texto. Info, Prensa Mexicana