Doha, 28 nov (EFE).- No le salió como esperaba a Diego Alonso la baza de Edinson Cavani, un referente del fútbol uruguayo que protagoniza sus últimos coletazos en el fútbol de alto nivel y que afronta en Qatar 2022 su etapa final como mundialista.
Tanta es la fe y la influencia del seleccionador en el jugador de Salto, ya de 35 años, que encontró la baza de El Matador para poner en entredicho la superioridad de Portugal en un duelo clave.
No viene rodado a Qatar el atacante uruguayo que alcanzó en Lusail los 130 encuentros con la celeste con la que ha anotado 54 goles. Estuvo a la sombra de Luis Suárez en el primer partido de Uruguay en el Mundial, pero en esta ocasión fue la apuesta de su técnico para la cita de la segunda jornada, con la posibilidad de sumar para acercarse a octavos.
La presencia de Cavani coincidió con el absolutismo luso. No vivió el veterano jugador del Valencia, este trotamundos por las grandes ligas del Viejo Continente, los mejores momentos de Uruguay. Por lo menos, los más atrevidos en los que su experiencia hubiera podido ser rentable para animar al conjunto sudamericano.
Alonso pensó en el pasado para decidirse por la apuesta de Cavani. Nadie olvida lo sucedido en Rusia 2018 cuando El Matador marcó los dos goles de Uruguay en el triunfo ante Portugal que supuso la clasificación del equipo celeste para cuartos. Quiso aprovechar el aspecto psicológico Diego Alonso y optar, dentro de una delantera entrada en años, por las condiciones de Cavani.
Llegó por los pelos Edinson a Qatar 2022 para entrar a formar parte del club de los cuatro mundiales. No ha faltado a una fase final desde Sudáfrica 2010, donde marcó un gol, en Brasil 2014, donde firmó otro, ni en Rusia 2018, donde mostró su mejor nivel y acumuló 3 dianas.
Podía pensar no hace mucho Cavani que no llegaría a tiempo a Doha. Incorporado al límite al Valencia, no fue rápida su puesta en marcha por problemas físicos que volvió a padecer en hace un mes, en el tobillo. Se quedó fuera de la dinámica del conjunto español, donde ya ha empezado a ser rentable. Pero no jugó.
Para Diego Alonso siempre es un hombre a tener en cuenta y le reclutó a pesar de no pisar un terreno de juego desde el pasado 29 de octubre. Llegó sin rodaje, con el alta en el bolsillo y sin minutos sobre el césped que le proporcionó la celeste ante Corea del sur, ante el que jugó media hora.
Cavani recuperó la titularidad en la cita contra Portugal. Un partido exigente ante un rival ahora superior donde el atacante del Valencia no encontró la magia, ni el idilio con el gol que hace tiempo que no encuentra y que le encumbró una vez más hace cuatro años en Rusia. Santiago Aparicio. Info. Prensa Mexicana