Los Ángeles, 29 ago (EFE News).- Una caravana de cientos de vehículos se tomó este sábado la calle principal del Este de Los Ángeles para conmemorar el 50 aniversario del Chicano Moratorium, una de las mayores manifestaciones pacíficas de latinos en EE.UU., que fue dispersada por la policía dejando 4 muertos y más de 150 detenidos en 1970.
“No podemos dejar que se olvide esa manifestación, ese movimiento, porque si dejamos pasar esa lucha vamos a seguir enfrentando situaciones como las que estamos viviendo con el diabólico Trump”, dijo a Efe Vibiana Aparicio, quién asistió hoy a la marcha.
Aparicio, de 75 años, fue uno de los más de 30.000 latinos que participaron en el Chicano Moratorium el 29 de agosto de 1970, un movimiento que comenzó dos años antes en protesta por el notable reclutamiento de latinos para enviarlos a la Guerra Vietnam y la iniquidad que vivía la comunidad.
La hispana, nacida en Los Ángeles, recuerda que la manifestación fue como una gran fiesta y un momento hermoso dónde mexicanos y nativos reclamaban el país como suyo, y deberían tener las mismas oportunidades de los blancos.
En ese sentido, Benjamin Prado, quién viajó desde San Diego con la organización Unión del Barrio a unirse a la conmemoración, advierte que “1970 fue el punto de inflexión dónde se logró la máxima expresión para los mexicanos de reconocernos como pueblo originario de este continente y rechazar las políticas coloniales de este país que nos relega como extranjeros en nuestra propia tierra”.
La necesidad de que se reconozca a los latinos no como inmigrantes sino como originarios de este continente, fue una de las consignas generales de la manifestación de este día, advirtió a Efe Jorge Rodríguez, uno de los organizadores del evento.
Los cánticos de la “frontera nos cruzó a nosotros”, “viva la raza”, “migra no” y “ganaremos esta lucha cueste lo que cueste” se escucharon por el recorrido de más de 14 millas (22 kilómetros) por el Bulevar Whittier, la vía principal del Este de Los Ángeles, barrio icono de la comunidad mexicana e inmigrante en California.
A la protesta de este día también se suman a las denuncias por la falta de acceso a la vivienda, la salud, y la educación que continúa sufriendo la comunidad, y que la pandemia de coronavirus ha resaltado nuevamente.
“Nuestra comunidad es la que más está sufriendo con esta pandemia porque, como en la Guerra de Vietnam, somos los que estamos poniendo el pecho, somos los esenciales, la carne de cañón”, insistió Rodríguez.
También se pidió un alto a la brutalidad policíaca.
Aparicio, que fue golpeada y quedó inconsciente en la manifestación de 1970, hoy asegura que los atropellos de la Policía continúan por el racismo que se ha perpetuado, y tomado fuerza bajo la Administración del presidente Donald Trump.
“Esto también es en solidaridad con los inmigrantes”, añadió Aparicio.
La caravana fue desviada en algunas cuadras por la Policía por la presencia de algunos grupos de apoyo a Trump, dijeron los participantes.
La conmemoración está programada para culminar con una masiva concentración en el Parque Rubén Salazar, llamado así en honor al periodista, pionero del periodismo latino en Estados Unidos, y uno de los cuatro muertos con el que culminó el Chicano Moratorium de 1970.
Gustav Montag, Lyn Ward y Ángel Gilbert Díaz, vecinos del sector, también perdieron ese día la vida.
La memoria de las cuatro víctimas será recordada en este aniversario.
El alcalde angelino, Eric Garcetti, honró este sábado a los que participaron en la protesta, por su “valentía, su sacrificio y cómo cambiaron el curso de la historia”.