Washington, 25 mar (EFE News).- El senador demócrata Dick Durbin dijo este jueves que, después de conversaciones con colegas republicanos, cree posible que 10 de ellos sumen sus votos para la aprobación de dos leyes de inmigración ya asentidas por la Cámara de Representantes.
En la Cámara baja, los demócratas tienen mayoría y aprobaron esas iniciativas con varios votos de republicanos, pero en el Senado será más difícil, pues necesitan al menos diez votos de los conservadores para proteger las iniciativas de maniobras parlamentarias.
Durbin, que en el Senado ejerce como “majority whip”, un papel de liderazgo en su partido que conlleva persuadir a sus compañeros para que apoyen las posiciones legislativas del grupo político, dijo en una entrevista con la cadena CNN que su encuentro de este miércoles con los republicanos resultó ser una “buena reunión”.
“Hablamos acerca de juntar diferentes puntos de vista y ver si podemos encontrar un punto medio”, señaló. “Quiero probar que hay una posibilidad de que diez republicanos se unan a los demócratas para una reforma significativa de la inmigración”.
Y, en su opinión, la reunión del miércoles fue “el primer paso” para conseguirlo y aunque no logró ningún acuerdo concreto sí que obtuvo el compromiso de un futuro nuevo encuentro para seguir dialogando. “Y eso es todo un progreso en el Senado”, destacó.
La semana pasada la Cámara de Representantes aprobó con nueve votos republicanos una iniciativa titulada “Ley de la Promesa y el Sueño de EE.UU.” que abriría una senda a la residencia legal permanente y, eventualmente, a la ciudadanía para millones de inmigrantes amparados en la Acción Diferida (DACA) y el Estatus de Protección Temporal (TPS).
Asimismo aprobó con el apoyo de 30 congresistas republicanos una iniciativa titulada “Ley de Modernización de la Mano de Obra Agrícola” que beneficiaría a más de un millón de trabajadores agrícolas indocumentados.
Otra propuesta más ambiciosa es la del presidente, Joe Biden, quien dijo que buscará un mecanismo para la legalización y, tras varios años, la naturalización de unos 11 millones de inmigrantes indocumentados.
En cuanto a esta iniciativa, el senador demócrata Bob Menéndez, de Nueva Jersey y quien encabeza el esfuerzo en la Cámara alta, dijo que no buscará que se inicie el debate en el Senado hasta que se logre un acercamiento de posiciones con los republicanos.
Y los dos proyectos de ley ya aprobados en la Cámara baja tampoco se llevarán a votación en las próximas semanas, tal y como quedó patente de las palabras de este jueves del jefe de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer.
El senador neoyorquino dijo que las prioridades de los demócratas en la Cámara alta en las próximas semanas serán la economía, los empleos y la pandemia, y que ya “en los próximos meses” tratarán de la reforma del sistema migratorio.
Pero si Durbin tiene éxito en sus negociaciones y suma diez senadores republicanos quizás se vaya a votación antes, aunque la situación en la frontera, con la llegada de miles de inmigrantes, no se lo podrán nada fácil.
No en vano, un grupo de 18 senadores republicanos viajan este jueves a la frontera con México para ver de primera mano la situación y han convocado una conferencia de prensa para este viernes donde, seguramente, volverán a criticar la política migratoria del presidente Joe Biden, a la que culpan del aumento de la llegada de extranjeros sin permiso para entrar al país. Info, Prensa Mexicana