México, 22 feb (EFE).- “Y mi palabra es la ley” es el nuevo libro del reputado académico mexicano Carlos Elizondo, quien compara las actitudes del presidente Andrés Manuel López Obrador con las de “El Rey”, la clásica canción ranchera de José Alfredo Jiménez.
“Tenemos un presidente que cree que su palabra es la ley, pero a diferencia de la canción, tiene trono y reino, y eso es lo que vuelve interesante el libro”, advierte este lunes Elizondo en entrevista con Efe.
EL PRESIDENTE “MÁS PODEROSO”
Aunque México no es ajeno al presidencialismo por las siete décadas que estuvo bajo la hegemonía del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Elizondo considera que López Obrador es “el presidente más poderoso” de la historia contemporánea.
La diferencia, argumenta el politólogo, es que López Obrador “es el presidente más legítimo que ha tenido México” por los más de 30 millones de votos, cerca de 53 % del total, que ganó en las elecciones de 2018, consideradas libres y justas por el grueso de la población.
Además, apunta, el PRI no era un partido “del presidente”, sino de grupos que administraban el poder, mientras que el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) es creación de López Obrador y “sigue sus instrucciones”.
“Es un presidente mucho más poderoso que los presidentes de la presidencia imperial, como le llama Enrique Krauze, porque esos presidentes siempre batallaban con problemas de legitimidad”, percibe Elizondo.
El primer capítulo del libro se titula “El Rey” porque analiza “el peculiar estilo de gobernar de López Obrador”, en el que “todo se organiza alrededor de él”, lo que “lleva a una forma de gobierno exitosa en la narrativa”, pero “ineficaz en los hechos”.
El académico aborda el éxito que tiene el presidente en controlar la agenda gracias a sus ruedas de prensas matutinas.
“La mañanera es una enorme creatividad por parte del presidente, le ha sacado muy buen provecho, es el mejor acto de propaganda que uno se pueda imaginar porque todos los días estamos hablando en torno de lo que él quiere”, expresa.
“COLONIZADOR” DE INSTITUCIONES
Pero más allá del estilo, el segundo capítulo advierte de la intención del presidente de “colonizar” las instituciones autónomas, como la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el Instituto Nacional Electoral (INE) y los reguladores de energía.
“Hay ciertos órganos constitucionales en los que no ha podido cambiar la ley o siquiera tratado, pero ha optado por otra estrategia, que es ir poniendo gente cercana a él o ir presionando a quienes están ahí a que tome decisiones más cercanas a su proyecto”, observa Elizondo.
Como caso extremo, ejemplifica con el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que suele fallar a favor del presidente y su partido.
Pero también está la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), donde ya ha colocado a 3 de los 11 ministros.
Además se ha mostrado cercano al mandatario mexicano Arturo Zaldívar, presidente del Supremo, quien ha avalado proyectos importantes para López Obrador, como la consulta pública para juzgar a expresidentes.
“No está plenamente colonizada la Corte, pero hay una relación de bastante cercanía entre ambos cuerpos, lo cual es un contrapeso crucial en la democracia con un régimen de separación de poderes”, indica Elizondo.
UNA PELÍCULA INCIERTA
El académico escribió este libro tras dos años del Gobierno de López Obrador porque “ya era bastante claro cuál era la ruta de la Cuarta Transformación (4T)”, como llama el mandatario a su proyecto de nación.
El profesor señala que el líder izquierdista “ya no cumplió” con sus objetivos, como un crecimiento anual promedio de 4 % del PIB, el alivio de la pobreza y la redistribución del ingreso.
“Lo que no tenemos claro es qué viene en los siguientes cuatro años. Una etapa intermedia que viene en esta película es la elección que tenemos este primer domingo de junio, en la que está en riesgo la continuidad de su proyecto”, observa.
Por ello, en los otros capítulos el experto realiza una radiografía de lo hecho por López Obrador, su relación con los empresarios, su política económica bastante ortodoxa y su política energética fiel a su nacionalismo de los 70.
También analiza su respuesta a la pandemia, que es “el problema más importante que ha enfrentado”.
“Ofrece una fotografía de los primeros dos años de un gobierno transformador, puede servir para entender qué se ha hecho, una reflexión sobre qué puede pasar en los siguientes años y una invitación a los mexicanos para participar en la política”, concluye Elizondo. Info, Prensa Mexicana
Pedro Pablo Cortés